Carlos R. Aguilar Jiménez.
Habiendo sido considerada zona de alto riesgo, lugar inseguro y una vía tan peligrosa que incluso el gobierno de EU instó a sus compatriotas a no visitar ni caminar por la Vía de Copérnico ni por senderos del Cerro del Fortín, donde ocurrían asaltos, robos e incluso violaciones debido a la inoperancia o corrupción de policías que se dedican y siguen haciéndolo, a extorsionar parejas de enamorados o amigos en convivencia social etílica o no, en lugar de garantizar la seguridad de visitantes al Planetario y Observatorio, siempre agazapados en las tinieblas y oscuridad de la Vía de Copérnico, hoy y desde hace días las circunstancias para pasear, caminar y visitar las instalaciones astronómicas de la ciudad en la noche han cambiado positivamente al haber decidido el H. Ayuntamiento rehabilitar la iluminación del camino desde el Auditorio hasta el Observatorio Astronómico Municipal, luciendo ahora la Vía espectacular, resplandeciendo segura y atractiva, garantizándose con la iluminación nocturna mayor seguridad y tranquilidad.
Deportistas noctámbulos, grupos escolares, aficionados a las ciencias del cosmos, paseantes, románticos enamorados, turistas, excursionistas y otros asiduos asistentes al Cerro del Fortín en la noche, habían dejado de visitar el lugar donde se puede disfrutar del asombroso paisaje de la ciudad de noche desde la explanada del Observatorio o de otros puntos, debido a que subir caminando en oscuridad era altamente peligroso para la seguridad, por lo que miles optaban por ir a otro lugar, porque si bien las escaleras del Fortín lucen iluminadas y hay seguridad debido a los vecinos y pequeños comercios de la zona, en la Vía de Copérnico, desde que los profes de la sección 22 se robaron focos y cables de la iluminación pública en 2006 cuando saquearon el Observatorio, no fue sino hasta ahora, 14 años después de tramites y solicitudes, que esta administración municipal decidió iluminar de nuevo la Vía de Copérnico, garantizando seguridad y tranquilidad a visitantes de la zona, especialmente a las mujeres que frecuentemente eran lastimadas por los rateros bien conocidos de la zona y a quienes los policías nunca arrestaban, o lo hacían y a la semana estaban libres operando impunemente. Ahora, con la resplandeciente iluminación de la Vía de Copérnico la ciudad rescata una de sus zonas más bellas, el único parque natural y silvestre accesible a todos, el punto de vista donde el paisaje nocturno de 360 grados es espectacular, por encima de todo donde se puede contemplar el Centro Histórico, Santo Domingo de frente y todo el panorama de la ciudad, pero especialmente la bóveda celeste a través de los potentes telescopios del Observatorio Astronómico Municipal, obviamente de noche, llegando por la ahora iluminada y radiante Vía de Copérnico que durante más de una década fue un lugar lóbrego, de tinieblas e inseguridad para todos los paseantes y visitantes del Observatorio Astronómico, a donde ahora se podrá llegar en total seguridad a través de la Vía de Copérnico iluminada y segura, claro, cuando acabe cuarentena.