Carlos R. Aguilar Jiménez.
Luego de más de un año de vivir relativamente aislados, en cuarentena, debido a la pandemia ocasionada por los chinos a quienes escapó el virus covid-19, además de las lamentables muertes de contagiados, en Oaxaca no se han recuperado 10 mil empleos según reporta el IMSS manteniéndose deprimido el sector laboral, pues según el último registro histórico, un mes antes del inicio de la pandemia, había 222 mil 350 trabajadores asegurados.
Con un déficit de más de 10 mil empleos al mes de abril 2021 Oaxaca todavía no recupera los empleos perdidos, reportó el IMSSS además de reconocer que el sector laboral se mantiene en crisis por dificultad en la iniciativa privada donde no se reporta ninguna perspectiva de recuperación económica, principalmente debido a que Oaxaca, especialmente la ciudad, es un lugar que carece de industrias, fábricas, agroindustrias, ganadería industrial, minería,, tecnología avanzada, dependiendo exclusivamente del sector turístico y remesas enviadas por migrantes desde EU, además de las participaciones federales que mantienen a la burocracia, convirtiendo al estado y capital en lugares dependientes del turismo, viajeros y paseantes que muy bien se dedica a ahuyentar el gobierno que permite todo tipo de abusos y atropellos a propios y extraños, y también los mismos oaxaqueños desempleados e inútiles para hacer otra cosa que no sea instalar un puesto ambulante, generando así un pésimo aspecto a la ciudad, sus servicios turísticos y seguridad para todos, porque es un hecho que la mala fama trasciende y aleja a potenciales visitantes que saben en cualquier momento pueden quedarse atrapados al ser secuestrado el aeropuerto, terminales de autobuses o quedar bloqueados por cierre de calles o carreteras, como acostumbran hacer impunemente los grupos de resentidos sociales que con cualquier pretexto se sienten felices agrediendo cruelmente a la gente que trabaja o es feliz, de la misma forma que sus líderes venales que muy bien saben poner de rodillas al gobierno y humillar a los gobernantes obligándole con amenazas e intimidación a que les den todo lo que quieren. Oaxaca no se recuperara y vivirá extrema crisis económica y desempleo porque los turistas no vendrán o tardaran años en regresar sabiendo que los atractivos turísticos están cerrados o con restricciones, que el Centro Histórico es un gigantesco y grotesco tianguis, circunstancias adversas que si bien antes no se podían saber excepto por la Prensa, hoy cualquier turista que pretenda venir a Oaxaca y que consulta antes por internet y redes sociales lo que pasa en Oaxaca, al enterarse como son los oaxaqueños, como hace cualquier viajero informado, opta por otro lugar para descansar, disfrutar y gozar sus vacaciones, evitando lugares donde la hostilidad es constante y la agresión permanente, de tal suerte que Oaxaca no se recuperara pero si se llenara de puestos ambulantes, cristaleros, rateros, resentidos sociales y toda la fauna de mal vivientes fracasados que gustan hacer daño a los demás abanderando banderas y partidos políticos, esperando su dádiva derivada del chantaje político estimulado por la 4T..