Carlos R. Aguilar Jiménez.
Sequía afecta al 33 por ciento de municipios oaxaqueños, y prevé Conagua que para septiembre se presente un sistema ciclónico que mitigue la falta de líquido… porque más allá que la cultura occidental proveniente de Europa, especialmente de España en el caso de México y Oaxaca determina que hay cuatro estaciones al año, como en Europa, meteorológica y regionalmente en nuestro estado únicamente existen dos estaciones: sequía y de lluvias, no hay más, porque las condiciones climáticas de otoño o invierno que viven los países que están al norte del Trópico de Cáncer no corresponde con las de Oaxaca como región intertropical, donde, por ejemplo, nunca nieva o los árboles en otoño se quedan sin hojas, porque aquí siempre hace calor entre 20 y 35 grados y las hojas incluso flores siempre están presentes.
Oaxaca se ubica geográficamente casi en la misma latitud de los grandes desiertos del mundo, por lo que su clima debiera ser árido, semiárido y desértico, no obstante, por encontrarnos en el istmo de Tehuantepec, en la región más angosta del continente después de Centroamérica, las condiciones oceánicas del Golfo de México y Océano Pacífico impactan en los municipios de Oaxaca donde ninguno está a más de 180 kilómetros del mar en línea recta, trayendo lluvias abundantes únicamente en temporada de ciclones, de agosto a octubre, no antes ni después, por lo que se entiende que los meteorólogos de Conagua tienen razón y, efectivamente a partir de septiembre tendremos muchas lluvias ciclónicas, porque las lluvias en Oaxaca no dependen de que haya árboles o no, sino de la temporada de ciclones y, si estos se mueven en dirección distinta de donde nos encontramos, las lluvias no llegaran, pero si los ciclones se dirigen a las costas oaxaqueñas tendremos mucha agua, liquido vital que además se desperdiciará porque casi toda el agua por escorrentías, arroyos y ríos se regresará al mar, porque no hemos sido capaces o inteligentes para condicionar a los gobernantes para que se construyan cientos de pequeñas represas o grandes presas para atajar y detener los miles de kilómetros cúbicos de agua que se precipitan en Oaxaca en tiempos de lluvias ciclónicas y, como los más descuidados, negligentes y necios, luego vienen las quejas de los municipios donde como ahora no llueve y falta, porque ya sea en una región del estado o en determinados municipios y desde nuestras propias casas, la mayoría prefiere lo que sea antes de construir una gran cisterna para almacenar agua y así no tener problemas, pero así somos, esperamos que sea la Divina Providencia o el gobierno quien solucione todo y no nosotros, acostumbrados por décadas a que sean otros los que solucionen los problemas. Agua hay en abundancia, por eso el negocio de los camiones cisternas, así que pregunto ¿tiene usted cisterna en su casa? O ¿existe una represa en su municipio?