CONTRAFUEGO || En defensa de Loret

Date:

Aurelio Ramos Méndez

La libertad de expresión en México, ahora sí, está en grave riesgo de abrogación. Por lo mismo, constituye un imperativo cívico defender el derecho de Carlos Loret de Mola a la manifestación, sin taxativas, de su pensamiento, patentemente amenazado por los dueños de la empresa en que labora. Latinus.

El famoso periodista ha tenido que hacer de tripas corazón para asumir como propia la protección de los propietarios y directivos del referido medio de comunicación, acusados de lavado de dinero, corrupción y operaciones con recursos de procedencia ilícita.

La denuncia correspondiente fue radicada por la Unidad de Inteligencia Financiera de Hacienda desde 2021 ante la Fiscalía General de la República, debido a que Latinus –que vende información, publicidad, opinión y dizque periodismo de investigación—le paga a Loret ¡con el producto de la venta de medicamentos al sector público!

Puede entenderse que las noticias que se generan en nuestro país causan o recrudecen problemas de salud mental como el estrés, la ansiedad o la depresión, cuya atención requiere de sofisticados servicios médicos y toneladas de medicinas.

Lo que cuesta más trabajo comprender es que aquellos padecimientos puedan ser aliviados, o mejor aún, sanados por reporteros, conductores, comentaristas, politólogos, entrevistadores… o el payaso Brozo.

Entre 2020 y 2024 Latinus ha recibido del erario –seis gobiernos estatales y el federal —la bicoca de ¡2 mil 437 millones 285 mil 272 pesos con 96 centavos–, recursos con los cuales ha cubierto desmesurados, fabulosos sueldos de sus empleados, entre estos los siguientes:

Loret, Víctor Trujillo, Lorenzo Córdova, Fernando del Collado, Jesús Silva Herzog, María Sherer Ibarra, Guillermo Sherindan y Claudia Bárbara del Regil.

¿Qué tan fabulosos han sido esos sueldos? Juzgue el improbable lector, con solo dos botones de muestra:

Loret ha recibido en cuatro años 11 millones 927 mil 634 pesos; en cifras gruesas, 9 mil pesos diarios. Trujillo, unos 8 mil pesos cada 24 horas para un total de 9 millones 522 mil pesos.

“Con dinero baila el perro”, reza el refrán, pero se antoja increíble que periodistas de tranco largo y convicciones con firmeza de riel como los mencionados hayan cedido sin chistar a las presiones de sus patrones y se hayan puesto a mover el rabo al ritmo de El baile del perrito. No, que va. Los agravia la sola suposición de que algo así pudo haber ocurrido.

Uno tiene que pensar, más bien, que Loret y sus compañeros de nómina están comprometidos con la verdad y la justicia. Y que, a la luz de los datos difundidos por las autoridades, sus empleadores están siendo investigados por genuinas fechorías.

Cualquiera que sea la situación jurídica del combo de socios del consorcio mediático, empero, tiene que darse por descontado que un periodista con elevada noción de la ética como Loret no puede –por regio que sea su sueldo o acendrada su admiración y lealtad a los patrones—salir en defensa de presuntos mafiosos.

De cara a sus contratantes, estos comunicadores deben convencerse de que no es lo mismo tener honra que ser honrado.

La corporación de la cual Christian González Guadarrama aparece como mascarón de proa, con una tripulación formada por políticos como Roberto Madrazo, Silvano Aureoles y Francisco Javier García Cabeza de Vaca, entre otros, todos mediante testaferros, emitió un comunicado en el que niega haber incurrido en ilicitud alguna.

Desde su escala en algún lugar del mundo, Loret –con ausencia anunciada de dos meses, no se sabe si en fuga o de vacaciones—asumió como suyo el boletín de sus jefes.

Lo replicó en las redes sociales y hasta le añadió interpretaciones en torno a la investigación de la FGR, lo cual no se explica sino por un fuerte apriete de clavijas por quienes sufragan su sospecho y exorbitante estipendio.

Es decir, que el patiño de Brozo está sufriendo despiadada violación de su libertad de expresión y merece urgente solidaridad.

El gobierno hoy confesó la investigación de la UIF y confesó sus motivaciones: quiere desaparecer Latinus en venganza por haber revelado la corrupción y el tráfico de influencias de los hijos del Presidente, escribió Loret bajo inadmisible coerción.

No faltará el atrevido que pueda parafrasear el dicho según el cual el que nació para buey hasta la coyunda lame, con lo cual se dé a entender que Loret es Loret cuando defiende a pillos de siete suelas.

Otros, en cambio, le concederán el beneficio de la duda y sostendrán que su derecho de expresión está siendo duramente pisoteado por sus jefes.

Que, él y otros comentócratas tenían razón cuando advertían que la libertad de expresión estaba en grave peligro, pues han sabido siempre que el bozal está en manos de los dueños de medios.

Cabe en este punto la aclaración de que no es sólo Loret de Mola quien resiente el apriete de tuercas de los socios y directivos de Latinus. La politóloga Denise Dresser, dechado de ecuanimidad, ya percibió riesgos para la libertad de expresión.

Por lo mismo, anunció que interpondrá una denuncia penal pero no en contra de los corruptos lavadores de dinero de Latinus, quienes solventan su colosal sueldo, sino del Jefe del Estado, que los despojó de su máscara.

Se explica la aberración de tratar de endereza las baterías de la justicia no en contra de los delincuentes, sino de quien procura la aplicación de la ley. De bajar Latinus las cortinas se estrecharían sus canales de expresión y esta sobria comentarista, al igual que otros de su talante, empezarían a sentir nostalgia del bozal.

Es apremiante, por todo ello, espetarles en la cara a los dueños de Latinus “¡Loret no se toca!”. O, que éste nos diga a los mexicanos si 12 millones de pesos bien valen la pérdida de la dignidad…

BRASAS

El gobierno de Estados Unidos se ha quedado sin legitimidad para oponerse a la reforma judicial o –con su acostumbrado tono estentóreo—exigir la vigencia en México del Estado de Derecho, acorde a su conveniencia.

Es así porque el pasado 1 de julio la Corte estadunidense emitió un fallo vergonzoso, que sin embargo resultó providencial para nuestro país.

Ese día le otorgó a Donald Trump y otros presidentes inmunidad constitucional, con objeto de hacerlo inalcanzable para el brazo de la justicia. En el caso específico de Trump, garantizarle impunidad por el motín del 6 de enero de 2021 –la toma del Capitolio—con que buscó revertir su derrota electoral.

El fallo fue impugnado con dureza por Joe Biden, porque –dijo—“socava el Estado de Derecho”, el cual dispone que “nadie está por encima de la ley, ni siquiera el Presidente de Estados Unidos”.

Biden agregó que él respetará los límites del poder presidencial, como lo ha hecho siempre, “pero cualquier presidente, incluido Trump, ahora será libre de ignorar la ley”.

La resolución fue aprobada por la mayoría compuesta por magistrados conservadores y combatida con todo por los demócratas. “Es tan mala como suena y es infundada”, dijo la jueza Sonia Sotomayor.

Trump, en cambio, escribió en X: “¡Gran victoria para nuestra Constitución y nuestra democracia! ¡Orgulloso de ser estadunidense!”.

Así, el eventual retorno a la presidencia del magnate de la greña anaranjada o la victoria de Biden tendrán, de entrada, el baldón de la ilegitimidad sembrada por la Corte.

Está claro que la potencia vecina hace en el mundo lo que se le da la gana. Así y todo, cuando el muy probable presidente Trump abra el pico para exigir Estado de Derecho en nuestros pagos, el gobierno mexicano tendrá el recurso de recomendarle que primero restituya la constitucionalidad en su tierra, porque el buen juez por su casa empieza.

***

Grotesco espectáculo el que protagonizan Felipe Calderón y Marko Cortés, exhibiendo de manera recíproca sus miserias e incompetencias.

Se disputan el triste mérito de haber sido los peores dirigentes del desvencijado PAN, cada uno con su camarilla chapaleando en la corrupción. El indefendible Cortés va ganando de calle el pugilato.

El actual presidente panista acusó a Calderón de haber causa la peor caída de votación en la historia de este partido cuando fue dirigente.

Le recordó que en 2012 pactó con el PRI hacer perder a la candidata presidencial panista, Josefina Vázquez Mota. “La explicación para los panistas es muy clara: dejaste completamente sola a Josefina y pactaste con Peña Nieto”, le recriminó al expresidente.

Y sacó a relucir el asunto que tiene a Calderón a salto de mata y constituye un esparadrapo en la boca del exmandatario cada que éste intenta sacudirse las presunciones de complicidad:

“Aprovecho también para pedirte que nos expliques qué pasó con García Luna (…) ¿Tú no estabas enterado de lo que pasaba en tu gobierno o lo consentías?”.

Sobre este punto cabe la observación de que a García Luna le salió un defensor de oficio.

El secretario de Trabajo de Calderón, Javier Lozano Alarcón –dechado de carisma y simpatía—tachó de cobarde a Cortés por su deslinde del exsecretario de Seguridad Pública preso ahora por narco en Estados Unidos.

El actual dirigente panista atribuye las críticas de Lozano a –¡salió el peine!—el enojo porque éste le pidió una candidatura plurinominal para ir al Legislativo y él se la negó. Puede ser este el caso; pero la actitud del calderonista tiene penetrante tufo a complicidad.

En la penosa e irritante coyuntura, el Presidente López Obrador le puso punto final al espectáculo más ruin de la temporada. “Cuando no se reparte bien el botín, hay motín”, dijo con toda razón el de Macuspana.

RESCOLDOS

Si en afán de distraer al respetable para consumar sus transas, el ahora administrador del PRI, Alejandro Alito Moreno se sacó de la manga eso de que políticos de su partido están involucrados en el asesinato de Luis Donaldo Colosio, disparó por la culata. La FGR, se afirma en medios oficiales, lo intimará a decir lo que sabe. Deberá comparecer ante la mesa del Ministerio Público. ¿Será?

Se le acumula el trabajo a la Fiscalía, pues en su rama electoral también será citado a declarar el obispo de Apatzingán. Sí, ese que se dice convencido de que con Claudia es inminente la instauración del comunismo en México. Afirmó que conoció casos de compra de votos en 1,500 pesos y que le dijeron que llegaron a cotizarse en 5,000. El deslenguado cura deberá decir lo que sabe, sin parapetarse en el sacramento de la confesión. 

aurelio.contrafuego@gmail.com

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here

Share post:

spot_img

Popular

More like this
Related

Reforma a la Ley del Infonavit busca erradicar la corrupción y garantizar el derecho a la vivienda 

El director general del Instituto, Octavio Romero Oropeza, acompañó...

Soberbia política

Carlos R. Aguilar Jiménez La soberbia, que según el diccionario...

Maryfer y yo: entrevistas insólitas

Segunda parte Renato Galicia Miguel Cuando acabé mi entrevista con Maryfer...

CONTRAFUEGO || Layda, imperiosa destitución 

Aurelio Ramos Méndez Layda Sansores tiene que ser destituida del...