La incertidumbre sobre la deuda nulifica la credibilidad de Cué

Date:

gallino

+ ¿El Estado está reconociendo las deudas educativa y de salud?


Es tan complejo el entramado legal y financiero de la deuda de una entidad federativa, y tan pobre y poca la voluntad del gobierno por explicar y reconocer los montos y las causas por las que en realidad enfrenta deudas, que conocer con exactitud la deuda estatal de Oaxaca es casi imposible. No sólo eso: el vacío de información ha abierto un enorme espacio de especulaciones sobre el monto real de los pasivos financieros de la entidad, que lo mismo pueden ser ciertos, que haber sido resultado de la imaginación o la intención de quienes los hicieron circular. El problema más complejo es que a estas alturas, nadie cree lo que el gobierno dice y eso profundiza la incertidumbre sobre la situación financiera de la entidad.

En efecto, en reiteradas ocasiones el gobernador Gabino Cué ha señalado que su administración dejará una deuda de alrededor de 14 mil millones de pesos, y que deja unos dos mil 500 millones más en el pago pendiente a proveedores del gobierno estatal a los que él ya no alcanzó a pagar. Ayer, sin embargo, el aún gobernador Electo, Alejandro Murat Hinojosa señalaba que el monto que recibirá de deuda no es de 14 sino de 16 mil millones de pesos, además de los dos mil 500 millones de pagos pendientes a proveedores. En todo este tiempo, el gobierno de Cué se ha resistido a clarificarle a la ciudadanía por qué sí enfrenta una deuda por el monto que asegura, y eso abre espacios para engañar no sólo a los oaxaqueños, sino para ofrecerle lo mismo la realidad que medias verdades al nuevo gobierno de la entidad.

En ese sentido, es evidente que el problema de fondo no radica sólo en el monto exacto de la deuda, sino en la credibilidad de la palabra del Gobernador saliente. Pues resulta que durante mucho tiempo ofreció a los oaxaqueños explicaciones y promesas que no resultaron. Básicamente ocurrió lo mismo con todos los sectores con los que tiene adeudos (a los que asimismo prometía pagos que no llegaban); y la opacidad fue el único común denominador en todo lo relativo a la justificación del crecimiento exponencial de la deuda estatal, a pesar de no haber realizado grandes obras ni haber enfrentado contingencias naturales como en otros tiempos. Incluso, el gobierno ni siquiera se responsabilizó por el desastre social y económico provocado por la crisis magisterial, como para tratar de justificar que en la reconstrucción invirtió los recursos que hoy se cuentan como pasivos financieros.

Esa combinación de opacidad y resistencia a la información, es lo que ha generado el enorme vacío en el que ya nadie sabe quién dice la verdad, cuál es el monto real de la deuda, qué conceptos son los que tienen pasivos, y cuál es el tratamiento posible para el pago de la misma. Gracias a ese vacío, han corrido versiones que —por la misma incertidumbre— ya no se sabe qué tanto nivel de verdad puedan tener.

VERSIONES

Hace algunas semanas corrió una versión que decía que la deuda de Oaxaca no era de 14 mil, sino superior a los 45 mil millones de pesos. Es imposible constatar la veracidad de la información —porque no se ofrecen pruebas—; pero el vacío y el silencio informativo provocado por el gobierno, pone en entredicho la información, básicamente con las mismas posibilidades de ser real que falsa.

¿Qué dice la nota? Que las finanzas públicas de Oaxaca soportan una deuda superior a los 45 mil millones de pesos, producto de la acumulación de compromisos financieros de los gobiernos de Ulises Ruiz Ortiz y Gabino Cué. A pesar de ello, las condiciones de pobreza, marginación e inmovilidad económica son todavía más graves de las que prevalecían a principios de la década pasada.

Hoy —continúa la información, disponible en http://bit.ly/2fOnDL2—, Gabino Cué y su Secretario de Finanzas, Enrique Arnaud Viñas han reconocido que la deuda de su administración asciende a los 16 mil millones de pesos, sólo en pasivos directos y deuda contratada, según han asegurado dentro de un mar de cuestionamientos, para la realización de obra pública.

Dicha deuda, acumulada a la dejada por Ulises Ruiz, hacen un subtotal de más de 28 mil millones de pesos, a los que deben añadirse los nueve mil que siguen existiendo como pasivo del sector educativo y que involucran directamente al IEEPO por los sobresueldos  y privilegios salariales que siguen teniendo los trabajadores agremiados en la Sección 22 de la CNTE, los cuales no son pagados por la federación sino que se siguen cargando a la deuda educativa estatal.

Además de esos 37 mil millones, el gobierno de Gabino Cué ha evitado reconocer que existen otros seis mil millones más, por concepto de pasivo de los Servicios de Salud de Oaxaca, que está a punto de colapsar por la falta de insumos y materiales de curación y cirugía básicos en clínicas, centros de salud y hospitales dependientes de dicho sistema.

Y un último elemento a agregar es la deuda a corto plazo por 2 mil 500 millones de pesos que se le debe a los proveedores y contratistas del gobierno. Por eso en realidad la deuda estatal rebasa los 45 mil millones de pesos, que el gobierno de Gabino Cué se niega a reconocer, y que también contempla la protección a los abundantes actos de corrupción tanto de sus funcionarios, como los cometidos durante el periodo de Ulises Ruiz que nunca fueron investigados y sancionados como debiera corresponder de acuerdo a la ley.

INCERTIDUMBRE

¿Cómo saber si esa información tiene fundamentos? Ante tanto dispendio e irresponsabilidad, ¿cómo no pensar que algo hay de cierto? ¿Le habrán dicho toda la verdad al Mandatario entrante? Pronto lo sabremos.

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here

Share post:

spot_img

Popular

More like this
Related

¿Qué tienen que ver el Toro y Harp?: nada

Renato Galicia Miguel Dos cosas horribles han sucedido en las...

CONTRAFUEGO || Réquiem por la oposición

Aurelio Ramos Méndez Suena a exageración, pero en modo alguno...

Perder territorio

Carlos R. Aguilar Jiménez México, que hoy ya no es...

CONTRAFUEGO || Corte de tinterillos

Aurelio Ramos Méndez Si tuvieran al menos una leve noción...