Carlos R. Aguilar Jiménez
Justo hace 100 años, en 1924, cuando el astrónomo Edwin Powell Hubble (de quien lleva su nombre el telescopio espacial), observando y fotografiando galaxias cercanas a la nuestra a través del telescopio, al analizar el espectro de su lejana luz descubrió que todas se alejan de nosotros. Cálculos posteriores demostraron que se separan recíprocamente en forma proporcional a la distancia. El Universo no es estable, se expande, hincha, crece a partir de un punto y tiempo inicial.
Si pasáramos la película hacia atrás desde el inicio, llegaríamos a un momento inicial en el pasado cuando todo estaba junto y fue hace 15 mil millones de años, momento en que ocurrió el Big Bang, una colosal explosión y posterior inflación que transfiguró lo que existía antes por medio de una transición de fase o cambio de estado explosivo de lo que preexistía, porque de la Nada, que es Nada, no puede crearse algo; la nada es inexistencia, ausencia total, y de ese estallido tornó el universo en otra forma o tipo de existencia de la previa, porque antes existía algo, no sabemos qué pero había algo, un hiper universo, multiverso, que ha existido siempre, sin principio ni fin, eternamente.
Si el multiverso, hiper universo o metaverso ha existido eternamente, siempre, perennemente, sin principio ni fin, entonces nunca ha sido creado y no puede haber un Creador que lo haya creado en siete días, siete mil millones o el tiempo que sea de años, milenios o eones, porque ya estaba, siempre ha estado, pues si no hubiera estado entonces no habrá nada y la nada no existe y, de esa nada no puede surgir algo, la nada es nada. A la etapa prístina del Universo se le llama Ylem, del griego, para referirse a la etapa primigenia, cuando en los primeros instantes se formaron subpartículas atómicas, campos, fuerzas y toda la materia, queahora sabemos desde el descubrimiento de la Partícula de Higgs, también de Dios, es esta-onda-campo-partícula, la que le da materia a la energía, a los fotones que no tienen masa.
Podemos inferir como interactúa la Partícula de Higgs con la materia y observar que tanto su espín como su carga es igual a Cero, y puesto que es un cuanto de “nada” si bien una explicación requiere términos de mecánica cuántica, como gluones, acoplamientos, bosones o vacío, el campo de Higgs podría entenderse mejor como un Océano Cósmico infinito y Eterno, jamás nunca creado por un ser sobrenatural, divino, omnipotente o celestial, porque el Universo nunca fue creado, siempre ha existido, en un forma, estado u otra desconocida, pero ha existido siempre, como consecuencia directa del descubrimiento de Hubble en 1924, hace un siglo, de la expansión e inflación del Universo.